lunes, 27 de febrero de 2012

Las flores de nuestro balcón.


Cuando dejamos aquella querida casa que edificaron mis padres, trajimos un par de macetas con azaleas. Luego de unos años se marchitaron, el año pasado para el día de la primavera partió esa hermosa florcita que se llamó Frufrú... Hoy sus cenicitas se encuentran junto a una nueva azalea. Las plantas pueden reemplazarse, los amores no. TE EXTRAÑO MI CHIQUITA.